Paul David Hewson nació en Dublín en 1960. Si alguien en la concurrida Dublín natal gritase por la calle, al viento , Paul, Paul!!! , él ni siquiera se giraría, porque ya está demasiado acostumbrado a que le llamen únicamente Bono. Bono el de U2.
En mayo de 1993, el jet privado del grupo, ya por aquel tiempo convertido en uno de los grandes iconos de la música mundial, aterrizó en Oviedo.
Al aterrizar, y poner pie en tierra, una lluvia ligera que sorteaba, al caer, la intensa niebla que impedía ver a pocos metros de distancia, los recibió. Dicen que Bono exclamó que eso le hacía sentirse como en casa.
El grupo actuó esa misma noche para cerca de 20000 personas entusiasmadas en el vetusto Carlos Tartiere.
Al acabar el concierto, el planing incluía la vuelta en su avión privado hasta Suiza, que era el lugar de residencia del grupo en aquella época, hasta que tuviesen que actuar cuatro días después en Madrid.
Todos se fueron, excepto un miembro, que decidió pasar esos 4 días de incognito por España, disfrutando y conociendo nuestras costumbres. Ese miembro de U2 era Bono.
Es conocida la afición de Bono por los buenos caldos, por la enología y por la cultura de lo biológico.
El 21 de mayo de ese 1993, Antonio Pérez, vecino de Villafranca del Bierzo, fue parado a la entrada de la villa, por un transeúnte que le preguntó, más bien con señas, por un lugar donde pudiese tomar algún vino de la zona, a lo que Antonio recuerda haberle respondido, en el mismo idioma, es decir, con señas, que cualquier sitio que viese abierto era bueno para tal fin.
Durante toda la mañana, Antonio, fan de la música rock, debido a su participación juvenil en grupos de escasa repercusión en la zona,eso si, como guitarra solista, y fan en concreto de U2, sabia que la persona que le había preguntado era Bono.
Lo tenía claro, pero cuando lo expuso a algún amigo cercano, no es que no le creyesen, es que no sabían ni siquiera quien era "ese" Bono, por lo que perdió todo el interés en seguir con su elucubración mental.
Sería dos años mas tarde, cuando enfrascados en una conversación en una de las bodegas que todavía resistían abiertas en la famosa calle del agua de Villafranca, cuando el propietario, despotricando sobre los extranjeros que nos visitan, se quejaba amargamente de que al no conocer nada de nuestro idioma, a veces de iban sin pagar, o que incluso le dejaban billetes extraños de otros paises, que el no sabía si tenían valor o no.
-" es más...., todavía recuerdo hace un par de años, -apuntaba con énfasis de 12 de la noche y algún vinin que otro-,a un señor con gafas de sol oscuras, que no se las quitó, pase a que aquí no se ve un pimiento.... ya me dirás!!!
- " pues nada, el tío, va y se toma dos o tres vinos creo recordar,... de los buenos que tengo... y después, no se que me dice en un idioma raro, me pone un billete encima de la barra y se va..."
La verdad es que Antonio estaba harto de oírle batallitas de estas al bodeguero, por lo que no estaba prestando demasiada atención.
" mira, mira... todavía tengo el billete del geta ese, para que lo veas, tú que tienes mas mundo Antonio- me dijo sacando el billete entre unas latas herrumbosas-, mira, mira, !!!, creo que era de como 1000 pesetas.
El billete si era de 1000, pero era de francos suizos, y en uno de los bordes, llevaba escrito, tenue y difuminado , pero todavía visible, una frase que al leerla hizo que el corazón de Antonio diese un vuelco.
"21-05-93 Paul David Hewson was here".
Antonio apuro el vaso, sonrió y le dijo al bodeguero con una increíble satisfacción
- "Lo sabía !!....ah! y vete a cambiar el billete que te vas a llevar una sorpresa... te pagó bien los tres vinos"
Paco Pérez, era un niño que vivía en la Villa más maravillosa del mundo, Villafranca del Bierzo.
Villafranca, con su Castillo, sus dos rios, rodeada de montañas y viñedos, era el lugar perfecto para que Paco y su imaginación crecieran entre intrépidas aventuras por sus calles empedradas, llenas de Iglesias, Conventos y Casas Blasonadas con sus bodegas..
Paco empezó a caminar por las montañas, a estudiar las plantas del entorno y la fauna asociadad, llegó a pie a todos los pueblos del Bierzo por los antiguos caminos, habló con sus gentes y se empapó de la cultura tradicional.
Todo esto lo salpicó con viajes por España y el extranjero: los “Chateaux” de Francía y sus viñedos; la Inglaterra de los Beattles; las “Quintas” del Douro de la señorial Portugal; los colores de Marruecos … formando en su mente (a finales de los 60 y principios de los 70) su sueño: “Hacer el mejor vino del mundo respetando al hombre y al medio ambiente, en el lugar más maravilloso del mundo”.
A finales de los 60, Paco Pérez funda su bodega y comienza a vivir su sueño. Consciente del enorme potencial del viñedo de la zona, es impulsor de la D.O.Bierzo y lucha por su creación. Consigue la certificación europea ecológica en el año 1995, siendo la primera bodega de Castilla y León y una de las primeras de España y Europa en tenerla. Defiende la entrada de variedades internacionales respetando siempre la Mencía, y es de los pioneros en la internacionalización de los vinos del Bierzo, con gran acogida en diferentes mercados.